Paisaje Protegido Barranco de Erques

El espacio está dominado por una vegetación típica de las zonas bajas y de medianías de esta vertiente de la isla: 

• Un tabaibal dulce se extiende acompañado de cardoncillos, esparragueras, balos y leña buena, entre otros; para asociarse en algunas zonas con poblaciones de romero marino. 
• El cardón aparece a partir de los 200 metros de altitud junto a tasaigos y cornicales.
• Algo más arriba, en el termófilo, las tres especies dominantes son el acebuche, el almácigo y la sabina. 
• En las zonas más degradadas del espacio se extienden grandes campos de vinagreras, inciensos y magarzas. 
• En el cauce alto del barranco, acompañando a los balos, hay algunas especies relacionadas con los matorrales de alta montaña, cuyas semillas son acarreadas por el agua de lluvias torrenciales, como la yerba cumbre, el rosalito de cumbre, el alhelí del Teide e incluso alguna retama del Teide. 
• En la zona más baja, ocupada en gran parte por plantaciones de plataneras, existe la mayor población conocida de viborina triste.

Al contar con un gran desnivel y diferentes puntos con agua, existe una amplia variedad de ambientes para la fauna invertebrada. La lista es inabarcable e incluye numerosas especies endémicas de la isla y del archipiélago, entre las que destacan la canariela pilosa o el longicornio del cardón.

Por otro lado, el reptil más abundante es el lagarto tizón. Entre las aves que nidifican en el espacio puedes encontrar desde aves marinas, como la pardela cenicienta, y aves rapaces, como el ratonero o el búho chico, hasta paseriformes, como el cuervo, el vencejo unicolor, el bisbita caminero, la alpispa, el mosquitero canario o el jilguero. 

Los murciélagos son los únicos mamíferos autóctonos que habitan en el paisaje protegido, con la presencia constatada del murciélago rabudo y el murciélago de Madeira.

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